Como parte de su campaña “Wake up love” en Rusia, IKEA se propuso cambiar la forma de ver las películas en el cine, haciendo que la gente se sintiera un poco más como en casa. ¿Cómo? Pues sustituyendo las butacas de una sala de los cines Kinostar Deluxe Mega Khimki por cómodas camas de matrimonio en las que puedes ver la película acurrucado a tu pareja o en compañía de tu familia.
De este modo, el cine se convirtió en una especie de dormitorio gigante con 17 camas, una gran pantalla y diferentes muebles y productos de decoración de la marca como edredones, mesitas, cortinas o lámparas. La instalación estuvo disponible del 4 al 14 de diciembre, 10 días en los que los afortunados pudieron disfrutar del cine de una forma diferente.
[Visto en: Fubiz]
