Muchos dicen que vivimos en un mundo cada vez más indiferente, que caminamos por la calle pensando en nuestras cosas y apenas nos fijamos ni nos preocupamos por los demás. O al menos, eso es lo que parece. Y es que Kleenex se ha propuesto demostrar que esto no siempre es así, que lo único que necesitamos es un pequeño empujoncito.
Por eso, pusieron en marcha este experimento con cámara oculta en el que repartieron packs de dos paquetes Kleenex (uno para ellos y otro para compartir) para comprobar si la gente realmente compartiría con un desconocido sus pañuelos de papel. Una actriz que estornudaba sin parar era el gancho para comprobar la buena voluntad de los canadienses.
¿El resultado? En el vídeo que os dejo más abajo 🙂
[Visto en: Great-Ads]
