En el mundo tan sólo quedan 1.600 osos panda. Para dar llamar la atención sobre este hecho y sensibilizar a la gente sobre la importancia de cuidar el planeta para preservar las especies que están en peligro de extinción, WWF creó hace unos años esta curiosa instalación itinerante formada por 1600 esculturas, una por cada ejemplar de oso panda que queda en nuestro planeta.
El proyecto ha sido llevado a cabo gracias a la colaboración del artista francés Paulo Grangeon, el estudio creativo ‘AllRightsReserved‘, WWF y PMQ. La instalación, que actualmente se encuentra en Hong Kong, ha recorrido desde 2008 otras ciudades como París, Berlín, Roma y Taipei.
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