Las tarjetas de visita siguen siendo útiles en la actualidad, aunque muchos de nosotros no las tengamos en mente. El cambio tecnológico con el que convivimos día a día nos hace creer que estas tarjetas han pasado de moda, pero en verdad, sigue siendo un material de marketing impreso efectivo y productivo. Es un medio perfecto para distinguirse y para demostrar la personalidad de una compañía.
Recuerda que son como una carta de presentación con mucho poder, ya que resume quién eres, qué haces y cómo localizarte. No obstante, una de las partes más complicadas es el diseño de las tarjetas. Así que si tienes en mente renovar tus tarjetas de visita, aquí te dejamos diez ideas con las que le darás el toque creativo que necesitas para llamar la atención de todo el que te rodee.
¡Esperamos que os guste!
Utiliza ilustraciones
Estamos acostumbrados a que las tarjetas de visita se compongan del logo de la empresa y alguna frase que cumple la función de firma. Romper con esto y utilizar ilustraciones puede ser una buena forma de llamar la atención. Y si no, mira lo que la agencia digital Ueno Branding preparó para acicalar su propia imagen: tarjetas de visita con ilustraciones para resumir la personalidad de cada uno de los miembros de la agencia. Sin duda, el resultado es realmente genial.
Dale forma a tus tarjetas
Las típicas tarjetas de visita cuadradas con el nombre de la empresa, logo y contacto puede que te parezcan un poco desfasadas. Bueno, no pasa nada. Si quieres, puedes darles forma aplicando la personalidad de tu marca para que los clientes las identifiquen con el producto o servicio que ofreces. Valga como ejemplo la empresa familiar de Arcades Zelkys y su tarjeta de visita con forma de ticket de juego, o la empresa Hida Kuma, protectora de medio ambiente, cuya tarjeta tiene forma de hoja.
Elige bien los colores
Los colores son muy importantes en publicidad y marketing por su capacidad de comunicación: pueden transmitir y expresar sensaciones, sentimientos y estados de ánimo. Una de las principales funciones del color es la de atraer la atención del público para despertar su interés. Cada empresa debe utilizar los colores que la definen y la identifiquen. Este es un ejemplo de Marine Laurent, diseñadora gráfica, que ha combinado colores llamativos y arriesgados con ilustraciones propias ¿Resultado? Algo sorprendente y muy personal.
¿Y si probamos con realidad aumentada?
Esta es una de las técnicas de moda en este momento. Consiste en combinar el mundo real con el virtual mediante un proceso informático, con lo que se enriquece la experiencia visual y mejora la calidad de la comunicación. Gracias a esta tecnología se puede añadir información extra al mundo real por lo que nuestra tarjeta de visita se convierte en un elemento interactivo que cobra vida gracias al teléfono móvil. Este es un buen ejemplo realizado por la diseñadora gráfica Manon Louart.
Tarjetas de visita interactivas
Vale, puede que no tengas presupuesto para desarrollar la tecnología necesaria para crear un tarjeta con realidad aumentada. Pero eso no significa que no pueda ser interactiva. Como ejemplo de esto, echa un vistazo a la carta de presentación de Like Giants, una pequeña pero enérgica compañía de producción. La empresa buscaba demostrar al público su experiencia en la narración de historias, por lo que crearon una serie de tarjetas de visita transparentes e interactivas con un gigante amigo.
Todo lo que se ve a través de la tarjeta crea una escena con el personaje. Los clientes, proveedores y públicos recibieron estas tarjetas para unirse a la historia #LikeGiants. Tuvo una gran participación en redes sociales donde la gente compartía sus interacciones con el gigante en edificios, playas, caminos, etc.
Creatividad ante todo
Con una buena idea creativa para tu tarjeta de visita, ya lo tienes casi todo ganado. Pero recuerda que no solo se trata de ser creativo sino que el diseño también tiene que tener relación con el producto o servicio que tu empresa ofrece. Valga como ejemplo esta tarjeta de visita para el Dr. Federico Álvarez, dentista y odontólogo. ¿Puede molar más?
Adapta la imagen corporativa de la empresa
Una tarjeta de visita tiene que representar la identidad corporativa de la empresa para que el cliente la identifique al primer vistazo. Hay muchos modos de hacerlo: combinación de colores representativos de la empresa, formas, aplicando símbolos, incluyendo el producto o servicio, etc. Aquí traigo el caso del gimnasio “The Hive” (o “La Colmena”). Su tarjeta visita es una combinación de todo lo anterior comentado. Colores amarillos y negros asociados a las abejas e ilustraciones de pesas que dejan ver el servicio que se ofrece.
Diseños en vertical
Probablemente si piensas en una tarjeta de visita, la imagen que venga a tu cabeza sea de una tarjeta con la información puesta en horizontal. Pero, ¿por qué tiene que ser así? Un diseño vertical también puede distinguirnos del resto, aportando una nueva perspectiva a las tarjetas. Además, nos permite realizar nuevas ideas creativas a la hora de diseñarlas utilizando otro espacio que no es el tradicional.
Menos es más
El minimalismo es sexy. Para lanzar un mensaje o comunicar una idea no hacen falta 10 tipografías diferentes, ni 20 colores ni fuegos artificiales. Hay muchas veces en las que menos es más. Y si no, échale un vistazo a este trabajo para la marca de ropa SBon, cuyas tarjetas personales se basan en un diseño con colores suaves y el mínimo número de elementos posibles.
Bordes de colores
Si quieres dar un toque especial a tus tarjetas de visita, una de las tendencias en los últimos años son los bordes coloreados. Es una técnica que bien puedes pedir a tu imprenta o puedes hacer tu mismo con rotuladores o spray. Sin duda, es un toque original que puede complementar muy bien el resto del diseño de la tarjeta. Y si no, mira cómo han quedado estas con el borde decorado con pintura iridiscente.
[Diseños de las tarjetas de la cabecera: Ryan Putnam, John Howard, Mandy Rusch y Sophie Nemethy]