Cómo volver de vacaciones y no morir en el intento

Ha llegado el momento que más temíamos: la vuelta a la rutina. Esa sensación de vacaciones eternas desaparece y, mientras resoplamos, toca mentalizarnos en dejar atrás los viajes y el levantarnos más tarde para retomar esas tareas pendientes y empezar proyectos nuevos.

Sabemos que la mente de los creativos no descansa ni en vacaciones. Y aunque nos encante nuestro trabajo, a veces cuesta volver a acostumbrarnos a nuestros horarios de trabajo y seguir siendo productivos como antes. Por eso, hoy te queremos mencionar algunos consejos para que tu vuelta sea positiva y no eches (tanto) de menos tus días de relax.

Aprovecha estos meses de descanso

Es inevitable ver la vuelta a la rutina como un castigo. Pero es verdad que este descanso ha venido genial para despejar la mente y sabemos que esto es clave para la creatividad. A veces, el ritmo que llevamos nos desgasta y suele ser la causa de los bloqueos o sentirnos pocos productivos. Así que ahora es momento de hacer las cosas con la calma de las vacaciones.

Deja listo antes tu espacio de trabajo

No es plan volver a tu rincón de trabajo y que esté todo como lo dejaste antes de salir corriendo a la playa cuando empezó el verano. Si eres freelance, sabes que es importante tener el lugar donde haces tus tareas lo más organizado posible. Así que puedes dedicarle un día a limpiar y ordenar tu espacio para sentarte a trabajar con más ganas. Si necesitas algunas ideas sobre cómo organizar un buen espacio de trabajo en casa, échale un vistazo a este post que escribimos la semana pasada.

Prioriza tareas

Entre la bandeja de entrada que debe dar miedo, lo que te quedó pendiente antes de las vacas y los proyectos nuevos seguramente no sabes por dónde empezar. No es cuestión de volver y hacer todo el primer día, sino que se trata de establecer prioridades. Lo ideal es empezar por lo que más urge, como responder algunos mails o entregar trabajos, y así evitar estresarte apenas vuelves a la rutina.

No te sobreexijas

Como mencionamos, el ritmo ahora es más lento porque venimos de un largo descanso. Así que si no se te ocurren las mejores ideas estos primeros días o vas arrastrándote por el suelo hasta tu escritorio no te sientas culpable. Entender que no podemos ir de 0 a 100 es clave para no estresarte. Date gustos “de vacaciones” como trabajar en pijama, realizar alguna actividad de ocio al terminar o salir a dar un paseo.

Haz una lista de tareas y objetivos

¿Sabes cuando empieza un año nuevo y enumeras todas las cosas que quieres hacer? Pues, para muchos con la vuelta la rutina sucede algo parecido. Estamos perdidos y sentimos que tenemos y queremos hacer mil cosas. Hacer listas puede servir para organizarte mejor, hacer cambios en tu rutina o establecer nuevos objetivos. Nada mejor que volver al escritorio sabiendo por dónde tirar.

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