Cumplir medio siglo no es poca cosa. Y en Australia, IKEA ha decidido celebrarlo a lo grande: con salchichas a 50 céntimos, descuentos del 50 % en su icónica silla POÄNG y, lo que más nos interesa por aquí: una campaña que combina emociones, amistad y muchas (muchísimas) cajas de cartón por montar. Porque sí, IKEA cumple 50 años en el país y lo celebra recordando algo muy sencillo pero muy potente: en realidad, todo esto no ha hecho más que empezar.
La campaña se titula «Just the Start» y viene firmada por la agencia Havas Host. Su idea no es mirar al pasado con nostalgia, sino usarlo como trampolín para hablar del futuro. Y lo hace a través de una pieza audiovisual que, lejos de caer en la épica, pone el foco en lo cotidiano: mudanzas, cambios de casa, habitaciones de bebé, sofás que no caben por la puerta… Todo eso que suele ser un caos, pero que con ayuda de tus amigos (y de una furgoneta) se convierte en una historia que acabas contando entre risas.
La campaña juega muy bien sus cartas. A nivel visual está repleta de referencias que cualquier australiano reconoce: chanclas reventadas, casas art déco, coches típicos de barrio, calles soleadas y hasta moscas revoloteando. Todo envuelto en los códigos de marca de IKEA, pero sin perder el tono local que hace que conecte de verdad.
Y es justo ahí donde está la clave. IKEA viene a hablarnos de muebles. Habla de comienzos. De esos momentos en los que todo está por hacer, por montar, por vivir. Porque todos empezamos cosas nuevas constantemente: una mudanza, una pareja, un trabajo, una afición. Y tener una marca que entiende eso y sabe contarlo con empatía, humor y sencillez, es lo que convierte esta campaña en algo realmente genial.
