Hace unos meses compartí por aquí una campaña de The Ordinary en la que la marca utilizaba copys como «La gente encuentra raro que no pongamos nombres a nuestros productos. Lo intentamos una vez. Pero los científicos son redactores terribles. Así que seguimos llamándolo Ácido Hialurónico» o «El agua es un químico. El oxígeno es un químico. Si fuéramos «libres de químicos», no podríamos vender ni botellas vacías».
En ella, la marca ya mostró una personalidad que va contracorriente con lo que otras marcas hacen en su sector. Y en la nueva campaña que han lanzado siguen exactamente la misma línea destapando algunos de los mitos que la industria cosmética lleva años fomentando.
Así, de la mano de Uncommon Creative Studio, la marca ha lanzado The Truth Should Be Ordinary, un archivo digital gratuito con documentos científicos que desmontan creencias erróneas sobre algunos ingredientes como los parabenos, el aluminio en los desodorantes o la cosmética «natural».
La iniciativa busca democratizar el acceso a la información, permitiendo que cualquiera pueda entender la ciencia que hay detrás de los productos de cuidado de la piel, sin barreras ni términos confusos. Y para dar a conocer esta iniciativa, han creado una campaña que destaca algunas de estas verdades más llamativas, a la vez que dirige a los usuarios a la web donde podrán encontrar el archivo completo.
La verdad es que la estrategia es de 10, así como la dirección de arte de la campaña. Me flipan las imágenes en blanco y negro y la idea de dividir la pantalla para combinar sus productos con los elementos de los que están hablando.
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