Las grandes compañías suelen ser muy cuidadosas con su logo: tienen un manual con decenas de páginas en las que especifican de qué forma debe usarse, cuáles son los colores exactos, qué tipografía es la oficial…. Pero, ¿cómo puedes controlar eso cuando eres una marca tan conocida en todo el mundo como Coca-Cola?
Ese es el punto de partida de su nueva campaña, que lleva por lema «Toda Coca-Cola es bienvenida» y que pretende celebrar las diferentes versiones que negocios de todo el mundo han hecho de su logotipo en rótulos, fachadas o persianas pintadas a mano.
La campaña es obra de la colaboración entre las agencias VML, Open X, Essence Mediacom y Ogilvy PR y para desarrollarla han buscado diferentes interpretaciones del logo de Coca-Cola en negocios de todo del mundo. Después, han llevado esas versiones a los envases de los refrescos y las han convertido en piezas publicitarias que se verán en las calles de diferentes países como Brasil, México, Indonesia, Australia o Estados Unidos.
Sin duda, para una marca como Coca-Cola, abrazar y celebrar estos logos «no oficiales» tiene muchísimo sentido. Y es que la marca es tan reconocible que basta con un fondo color rojo y una tipografía dibujada a mano en color blanco para identificarla al momento.
Además, también es una forma de demostrar que la marca ha trascendido y forma parte de la cultura de muchos lugares a través de los carteles y los murales de negocios separados por miles y miles de kilómetros.
Sinceramente, me encanta esta campaña.