«WhatsApp no es una red social. Es una herramienta segura diseñada para dar a cualquier persona -en cualquier parte del mundo- la capacidad de conectarse y promover el cambio». Así explican desde Koto, el estudio responsable de este proyecto, cómo han afrontado el desarrollo el nuevo sistema de diseño universal de WhatsApp.
Esta renovación no toca el famoso logotipo de la plataforma, sino que estrena un nuevo concepto de marca «Forward. Together» («Adelante. Juntos»), una nueva paleta de colores y un sistema de recursos visuales que permiten a la marca comunicarse con su público de una manera emocional y cercana.
Este sistema de diseño busca hacer énfasis en lo que los usuarios adoran de la aplicación, su «simplicidad, flexibilidad y universalidad». De este modo, pretenden «conectar con una audiencia global, tanto visual como verbalmente» a través de un sistema que «representa el núcleo de la experiencia de WhatsApp: comunicarse sin esfuerzo».
Todo este sistema está basado en módulos gráficos flexibles que contienen diferentes mensajes en forma de texto, iconos o ilustraciones. Esto permite contar historias de forma visual en multitud de soportes y puntos de contacto.
