Si siempre has pensado que la comunicación de las universidades es demasiado institucional y aburrida, ojito, que hoy vengo con una campaña que rompe con todo esto.
Para promocionar sus programas de corta duración (conocidos como «microcredential courses» en inglés), la universidad de Bond ha instalado una colección de «micropuertas» en las calles de la ciudad de Brisbane. Al abrirlas, se puede escanear un código QR que conduce al usuario a una experiencia informativa que proporciona más información sobre el curso en cuestión.
¿El concepto detrás de esta acción? Pues que los programas de corta duración, a pesar de ser «pequeños», te abren grandes puertas en el entorno laboral.
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Estas «micropuertas» han sido creadas por el artista local Mace Roberson y el diseño de cada una de ellas representa un curso diferente de los que ofrece la universidad.
«Los programas de corta duración de Bond abren literalmente las puertas a la gente. Ya sea para su próximo ascenso o para una nueva trayectoria profesional, los cursos abren literalmente un mundo de oportunidades», explica Benjamin David, director creativo ejecutivo de VMLY&R.
«Este proyecto nos ha inspirado para explorar y encontrar nuevas formas de conectar la experiencia física “en la calle” y la digital, con el objetivo de dar a conocer los cursos y, a su vez, hacer crecer las inscripciones. Además, trabajar con un artista como Mace ha sido un placer», añade.
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