“Esta puerta de tren es la obra más cara de ARCO, vale 15 millones de Euros y la hemos pagado entre todos”. Así presenta Renfe esta campaña publicitaria que ha llevado a cabo en la Feria Internacional de Arte Contemporáneo que se está celebrando estos días en Madrid. Una acción no convencional que busca poner de relevancia un dato bastante impactante: el gasto público destinado a restaurar trenes estropeados por grafitis supera los 15 millones de Euros al año.
El principal objetivo, según Lucía Angulo (directora general de Shackleton, agencia responsable de la campaña), es “mover conciencias, pensamientos y generar debate”. Así, se trata de una acción de concienciación en la que un elemento que poco tiene que ver con la publicidad -una puerta de tren grafiteada- se convierte en un potente elemento de comunicación.
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Este es un buen ejemplo de cómo se puede utilizar un evento del que todo el mundo está hablando para lanzar un mensaje de forma efectiva. Y es que muchos medios tienen estos días sus ojos puestos en ARCO, por lo que se convierte en un escaparate estupendo para que una marca como esta lance un mensaje así. Y más todavía si lo hace de forma tan creativa como es este caso.
Además de la acción realizada en la feria, la campaña también cuenta con otras piezas que podrán verse en medios como digital, exterior, redes sociales o radio. También han creado un microsite, www.laobramascara.com, en la que están realizando una subasta inversa: el precio de la puerta va a ir descendiendo según se vaya utilizando el hashtag #LaObraMásCara en Twitter durante estos días.
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