Las buenas ideas no entienden de medios ni soportes. Muchas veces, se trata de que tú mismo crees el vehículo a través del cual comuniques tu producto. Pues bien, este es uno de esos ejemplos. Para promocionar Fevi Kwik han creado el primer cerdito-hucha reutilizable. Al romperlo para sacar el dinero de su interior, encontramos un bote del producto con el que poder reconstruirlo y volver a usarlo. Y así, todas las veces que queramos. ¡Brutal!
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