Me encanta la publicidad que nos rompe los esquemas, que activa una bombillita en nuestro cerebro que hace que digamos “¡Qué buenoooooo!”. Pues las gráficas que os traigo hoy son un gran ejemplo de lo que os hablo.
Podríamos decir que cuando un cabello se cae, se está suicidando. Este es el eje de estos anuncios de L’Oréal que tienen como protagonistas a pelos deprimidos que están a punto de tirarse por un precipicio. Pero ahí está Renaxil, que les tiende una mano para que no lo hagan. Unas grandes piezas para anunciar un producto, loción anticaída del cabello, que hasta ahora nunca se había caracterizado por su creatividad publicitaria.
Visto en: @AleCastellano + El blog de la Negreta
