Un espejo, un motor con GPS y una buena dosis de creatividad son los ingredientes detrás de esta campaña de IKEA que pretende hacer el verano un poco más llevadero a los habitantes y visitantes de Estocolmo.
Todos sabemos que el verano sueco puede ser impredecible y (a menudo) bastante frío. Por eso, a la agencia Åkestam Holst NoA se le ocurrió que podrían utilizar el espejo gigante NISSEDAL de IKEA para reflejar el sol y dirigirlo hacia terrazas y zonas que en determinadas horas del día están a la sombra.
Todo está automatizado con un motor con GPS, que garantiza que el ángulo del espejo se ajusta automáticamente en tiempo real según la posición del sol.
Sencillo, directo y creativo. Como suelen hacer las cosas en IKEA.