«Seguro que te sabes el nombre de tu calle, pero… ¿de verdad sabes dónde vives?». Así empieza el vídeo de esta interesante campaña que la agencia valenciana Maslow ha creado para Berklee College of Music. Bajo el lema #MúsicosConMuchaCalle, han creado un callejero donde recogen la historia de los 84 artistas musicales que dan nombre a las calles de Valencia.
La campaña cuenta con este vídeo que cuenta la historia de algunos de estos músicos, como los hermanos Amparo y José Iturbi, quienes trabajaron poniendo banda sonora a algunas películas de Hollywood, Concha Piquer, que fue la protagonista de la primera película de la historia con sonido o Francesc Tàrrega, quien compuso una de las sintonías más reconocibles de todo el mundo: el tono de llamada de Nokia.
Para realizar esta pieza, desde la agencia hicieron una gran labor de investigación para recopilar fotos con más de un siglo de historia a través de diferentes bibliotecas españolas, recortes de periódico digitalizados, partituras históricas e imágenes donadas por las familias de los artistas. Dale al play porque te prometo que es bastante interesante.
Este callejero está disponible en www.musicosconmuchacalle.com, de forma interactiva donde se pueden consultar todas las calles y la historia de los artistas, y en pdf para descargar. Además, también han puesto en marcha una playlist colaborativa para que todos los que quieran puedan proponer las canciones y grupos musicales más representativos de la escena valenciana actual.
Pero una de las cosas que más me gustan de la campaña son las piezas que han creado para exterior y que han instalado en diferentes puntos de Valencia. Con ellas, pretenden acercar la historia de estos artistas a la población en general y los más jóvenes en particular, por eso, las creatividades hacen referencia a artistas actuales como Rosalía o Residente y a géneros como trap o el rap.
Una iniciativa muy guay que ha hecho que me ponga a buscar la historia del pintor que da nombre a la calle donde vivo desde hace 4 años y del que no sabía absolutamente nada. Y tú, ¿de verdad sabes dónde vives?
