Los prejuicios en enfermedades como el VIH pueden llegar a hacer mucho daño a la sociedad. La mejor forma de combatirlos es la información, por eso Ogilvy Brasil ideó esta campaña para el NGO Life Support Group (GIV) en la que varias personas portadoras del VIH dejaron caer una gota de su sangre en los pósters publicitarios.
El virus puede permanecer vivo menos de una hora fuera del cuerpo humano, por lo que al secarse, los pósters de la campaña eran inofensivos para la gente. De este modo, transmitían la idea de que, al igual que los carteles, no hay por qué temer a las personas infectadas con el VIH. En este sentido, el propio director creativo de Ogilvy Brasil dijo que “el cartel humaniza el problema y reúne a la gente en torno a la causa, demostrando que es posible vivir en una sociedad libre de prejuicios”.
[Visto en: AgentSpy]