Ser rápidos y ágiles a la hora de utilizar la actualidad para la comunicación de las marcas es un reto al que nos enfrentamos cada día. Y es que aprovechar estas oportunidades puede ser una buena forma de conectar con los consumidores, llegar a más gente o conseguir repercusión. Justo ayer los chicos de la agencia alicantina Slump me hicieron llegar esta acción que realizaron para uno de sus clientes, Heilige & Sünder y que se basa en uno de los temas más comentados en los últimos días: el escándalo de las tarjetas black.
Pues bien, esta pequeña marca de ropa urbana ha creado 50 tarjetas black que han enviado a sus clientes más VIP para que pudieran darse un capricho sin preocuparse demasiado. ¿Las ventajas? Poder ir de compras y adquirir productos de alta gama sin dejar rastro, sin abonar IVA (se lo descuentan del precio) y sin tener que pagar con su dinero (al menos de momento). Así, los titulares de estas tarjetas podrán llevarse cualquier producto en los puntos de venta oficiales sin pagarlo, al menos al instante (tendrán un plazo de 3 meses para hacerlo).
Una promoción tan original como arriesgada, pero… ¿qué sería de la creatividad si no nos lanzáramos a la piscina y apostáramos por ideas como estas? Menos mal que hay clientes que se atreven 🙂