Con el objetivo de reivindicar el fotoperiodismo y hacer reflexionar a la población sobre su importancia, el periódico francés Libération ha eliminado esta semana todas las fotos de una de sus ediciones diarias. Así, donde debería haber fotos que ilustren las noticias, simplemente aparecían recuadros blancos sin ningún tipo de relleno.
Una reivindicación que llega en un momento en el que esta industria se enfrenta a muchos retos y cambios. En un artículo publicado en ese mismo número, la periodista Brigitte Ollier compara esta edición sin fotografías a un telediario mudo, sin sonido. A pesar de que el periódico mantuvo su diseño habitual, dejando huecos donde debería haber imágenes, al final del mismo, el lector podía encontrar una galería en la que aparecían las fotos que deberían haber sido publicadas en sus páginas.
Sin duda, una acción que me ha impresionado bastante, nunca me había imaginado cómo sería un periódico sin imágenes…
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