La mutilación genital femenina es una práctica tradicional que se viene realizando en algunas culturas desde hace más de 2.000 años. Esta operación se aplica en las chicas desde el nacimiento hasta el matrimonio y, en ocasiones, incluso después. Las cifras nos dicen que se estima que, en la actualidad, hay más de 200 millones de mujeres a las que se les ha practicado esta mutilación en los más de 20 países (la mayoría en África) donde es legal realizarla.
Para acabar con esta dura realidad, la asociación 28 Too Many lleva desde 2010 ayudando a las víctimas en estos países, realizando estudios y difundiendo campañas de concienciación. Esta que os traigo hoy es la última que han lanzado. Bajo el título “What is the price of FGM?” (“¿Cuál es el precio de la mutilación genital femenina?”), las piezas gráficas muestran unos monederos cuyo forro interior ha sido mutilado y vuelto a coser.
Esta campaña busca poner de manifiesto una dura realidad. Y es que hay doctores en muchos países que se lucran con esta práctica para compensar los bajos ingresos en el desarrollo de su actividad. No obstante, el precio para las víctimas es, indudablemente, muchísimo más alto, ya que algunas lo tienen que pagar con su salud física y mental e incluso con su vida.
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