¿Qué pasaría si quitamos todos los productos extranjeros de los lineales de un supermercado? Ese es el punto de partida de esta acción llevada a cabo por la cadena alemana Edeka para luchar contra el racismo. Y es que los comentarios y los ataques xenófobos están aumentando en el país a causa de la inmigración, especialmente desde que Angela Merkel decidió abrir las puertas del país a más de un millón de refugiados.
De esta manera, un supermercado de la cadena en Hamburgo apareció prácticamente desmantelado después de que eliminaran de sus lineales todos los productos extranjeros. En las estanterías, casi vacías, había carteles con mensajes como “Este estante queda muy aburrido sin variedad”, “Así de vacío se ve un lugar sin extranjeros” o “Nuestra selección de hoy tiene fronteras”.
La campaña ha tenido una buena aceptación en el país e incluso miembros del gobierno la han alabado, pero también ha generado cantidad de críticas negativas en las redes sociales.
[Visto en: B9]
