Seguramente alguna vez te ha parecido encontrar una forma al mirar las nubes o descubrir una cara según el patrón de un azulejo sin saber que se trata de un fenómeno muy común denominado pareidolia. Sin embargo, del otro lado también están los que realizan este proceso a la inversa y crean estas formas a partir de diversos objetos. Desde Bulgaria nos llega este caso que demuestra que la creatividad no tiene límites si se mantiene el ojo entrenado.
Vanyu Krastev es un artista callejero que humaniza elementos cotidianos mediante la tendencia del ‘Eyebombing’, basada en agregarle ojos a objetos inanimados para que “cobren vida”. Así, Krastev expresa su capacidad de detectar posibles caras en sitios inimaginables a los que agrega ojos de plástico para generar expresiones con un toque caricaturesco.
Entonces, ¿entrenamiento de la visión creativa o fenómeno psicológico? Lo que sí está claro es que definitivamente cruzarnos con una de estas piezas por la calle nos robaría una sonrisa a cualquiera. Además, en su Instagram puedes seguir las divertidas creaciones que el artista crea en plena calle.
[Visto en: GOLEM13]
