Las calles de Torrelodones (Madrid) se llenaron de color gracias a este proyecto de street art que el artista búlgaro Christo Guelov llevó a cabo en 2015. Bajo el título “Funnycross”, Christo añadió coloridos patrones y figuras geométricas a diferentes pasos de cebra de la localidad: frente a un colegio, al lado de un campo de fútbol, junto a la Casa de Cultura…Un proyecto que, según el propio artista cuenta, nació de la metáfora de que un paso de cebra es “un puente entre dos orillas”.
De este modo, las icónicas líneas blancas que indican el paso de las personas por la carretera se convirtieron en improvisadas obras de arte, que además de embellecer el entorno urbano, servían para llamar la atención de los peatones y los conductores en estos lugares. Así, lo que para nosotros es cotidiano y casi invisible porque forma parte de nuestra rutina se convierte en algo extraordinario, invitándonos a redescubrir nuestro entorno día a día.
Sin duda, hace falta más color en nuestras calles. ¡Gracias Christo!
[Visto en: DesignBoom | Fotografías: Rafael Pérez]
